Paso n. 1: Lava tu rostro con el Jabón Facial de Vitamina C. Aplica una cantidad adecuada, masajea en movimientos circulares y enjuaga con abundante agua. Seca el rostro suavemente.
Paso n. 2: Aplica unas gotas del Serum de Vitamina C sobre la piel limpia y seca. Masajea hasta que se absorba por completo. Ideal como capa base en las mañanas para proteger contra el daño solar.
Paso n. 3: Toma una pequeña cantidad de la Crema Contorno de Ojos y aplícala con suaves toques desde el lagrimal hasta las sienes, usando la yema de los dedos. Masajea delicadamente para activar la circulación y potenciar su absorción. Notarás al instante una mirada más fresca, descansada y luminosa, mientras reduces la hinchazón y los signos de fatiga.
Paso n. 4: Coloca la Mascarilla de Velo sobre el rostro limpio y seco, ajustándola suavemente para que se adhiera perfectamente a la piel. Relájate y deja que sus activos actúen durante 20 minutos. Luego, retírala y realiza un suave masaje con el suero restante hasta su completa absorción. Disfruta de una piel hidratada, luminosa y revitalizada al instante.
Paso n. 5: Finaliza tu rutina aplicando la Crema Antiedad de Vitamina C sobre rostro y cuello con movimientos ascendentes y suaves. Masajea hasta su completa absorción para potenciar su efecto reafirmante y luminoso. Disfruta de una piel más hidratada, firme y radiante cada día.